
Chacahua, Oaxaca: qué hacer, playas y nuestra experiencia de 3 días
Después de toda la aventura que supuso llegar a Chacahua (que ya te contamos en la entrada de «cómo llegar a a Chacahua«), nos quedamos 3 días disfrutando de este paraíso escondido en la costa de Oaxaca.
En este post te contamos día a día cómo fue nuestra experiencia, que cosas se pueden hacer y algunos consejos para que disfrutes al máximo de este magnífico lugar.

Nuestra experiencia en Chacahua
Día 1: Relajación total
Tras varias horas de buses, barcas y camionetas, lo primero que hicimos al llegar fue simplemente descansar. Nos instalamos en nuestro bungalow frente al mar y el plan no fue más que dejarnos llevar por la tranquilidad:
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- Comer en los chiringuitos de playa con pescado fresco.
- Tomar cocos fríos en hamacas mirando al mar.
- Caminar por kilómetros de playa casi desierta.
- Darnos un baño reparador en el Pacífico.
Fue un primer día perfecto para bajar revoluciones (hasta el punto de quedarme dormido esperando en un chiringuito esperando la bebida) y sentir el ritmo de Chacahua.


Día 2: Excursión al faro, playa infinita y tormenta eléctrica
Este día lo aprovechamos al máximo. Una persona del pueblo nos cruzó el río por unos 10 MXN y desde allí comenzamos una caminata hasta el faro de Chacahua. Las vistas son espectaculares, con vistas a todo Chacahua y el Pacífico a tus pies.


Nota: Durante la subida al faro podrás ver cientos de cangrejos rojos enormes que se irán escondiendo a medida que vayas acercándote. Los más grandes no se esconderán y se cubrirán con una de sus enormes pinzas.
De ahí seguimos hasta la playa que da hacia el otro lado, una playa paradisiaca, infinita y solitaria, un verdadero paraíso sin absolutamente nadie más que nosotros. También pasamos por el famoso arco de piedra que tanto nos comentaban los locales, una formación natural muy fotogénica.


La jornada terminó con una experiencia única: por la noche cayó la tormenta eléctrica más impresionante que he visto nunca justo encima de nosotros. Nos quedamos mirando los rayos desde la terraza (con algún que otro susto) pero que sin duda fue uno de esos recuerdos que se te graban para siempre.
Día 3: Playa, hamacas y un manjar peculiar
El último día lo pasamos en una zona de restaurantes frente al mar, al otro lado de la salida de la laguna. Se llega cruzando igual que el día anterior y es un lugar ideal para relajarse, comer bien y bañarse en aguas tranquilas.
Lo curioso del día fue ver cómo muchas familias comían unas pequeñas bolitas blancas. Preguntamos y resultó que eran huevos de tortuga, algo típico en la zona. Pedimos una ración para probarlos… aunque, sinceramente, nuestro paladar no estaba preparado para semejante manjar.


Nota: En Chacahua, el consumo de huevos de tortuga es una costumbre muy arraigada, aunque cada vez está más cuestionada por motivos de conservación. Aun así, para muchos locales forma parte de su tradición gastronómica.


Con todo esto, nos fuimos de Chacahua con la sensación de haber descubierto un rincón único de México, donde la naturaleza y la vida local marcan un ritmo de vida mucho más pausado de lo que estamos acostumbrados.
Consejos para aprovechar tu visita
Si estas pensando en venir a Chacahua, aquí te dejo una lista de consejos útiles para visitar y disfrutar Chacahua, basados en tu experiencia:
- Lleva efectivo suficiente: En Chacahua no hay cajeros automáticos ni bancos. Todo se paga en efectivo (desde las barcas hasta la comida en los restaurantes), así que calcula bien cuánto necesitarás antes de llegar.
- Prepárate para un viaje largo: El trayecto desde Puerto Escondido hasta Chacahua puede ser cansado, ya que combina van, taxi, barca y camioneta. Tómatelo como parte de la aventura.
- Elige bien tu alojamiento: Hay cabañas sencillas frente al mar y bungalows más cómodos cerca de la laguna. Si buscas más contacto con la naturaleza, quédate en cabañas rústicas en primera línea de playa como hicimos nosotros.
- Disfruta de la gastronomía local: El pescado fresco y los mariscos son espectaculares. Anímate a probar los platillos típicos como el pescado a la talla y los camarones al ajillo. Y si eres curioso, quizá te ofrezcan los famosos huevos de tortuga (aunque ojo, no son para todos los paladares).
- Explora más allá del pueblo: No te limites a la playa principal. Cruza en barca al otro lado de la laguna, haz la ruta al faro o visita la playa solitaria y el arco de piedra. Son experiencias que hacen la diferencia.
- Disfruta de las noches estrelladas: Chacahua es uno de esos lugares donde el cielo nocturno se ve increíblemente limpio. No dejes de mirar arriba cuando caiga la noche.
